por Euclides Fuentes Arroyo
Se necesita otra encuestadora que diga la verdad y no responda a una lupa de compra venta. Otra que madrugue a los barrios donde la gente pobre no tiene agua potable, en la ciudad y en el campo, inclusive los que viven al lado de las plantas potabilizadoras de Chilibre, Chepo y La Chorrera y pregunten allí qué opinan del despelote que desgobierna en este sufrido país.
Que a las tres de la mañana confronte a miles de mujeres y hombres que a esa hora soportan lluvia esperando por un transporte colectivo que los lleve a sus sitios de trabajo, y maldicen que no hay metro buses ni diablos rojos.
Que consulte a los ciudadanos de la tercera edad, menores y adultos, que no encuentran en la Caja de Seguro Social ni atención ni medicamentos porque cada día es más ineficiente la prestación de servicios en una entidad que sufragamos los trabajadores y la patronal, mientras la administración sin transparencia dispone de cuantiosos recursos para salarios y vehículos lujosos que disfrutan los de arriba.
Que refleje la reacción del panameño de a pie por la indolencia de un mandatario que se burla de los desastres naturales y sociales trepándose al avión presidencial para realizar giras al extranjero sazonadas con declaraciones que nos ponen en ridículo internacional y que son el producto del pésimo manejo de política exterior.
Otra encuestadora que ausculte la percepción ciudadana sobre el despilfarro que trae consigo la corrupción y los chanchullos para adquirir tierras en playas y áreas turísticas bendecidas con la impunidad de los ejecutores de tantas felonías. Que muestre la respuesta de la gente sensata ante la compra de conciencias a cambio de borrar los expedientes a diputados, alcaldes, representantes y delincuentes de cuello blanco, susceptibles de juicio público por sus fechorías Que pregunten a indígenas masacrados y a colonenses que valientemente han puesto los muertos en defensa de su dignidad, si sienten alguna simpatía por la violenta represión ordenada por el ministerio de inseguridad.
Se necesita en fin, otra encuestadora que no interrogue solamente a la élite, a los miembros del partido oficialista y los millonarios que entraron al poder para convertirse en multimillonarios. Otra empresa de este tipo que no pretenda que este pueblo es tan imbécil para que luego de tres años le espete que hay figuras gubernamentales, ministros o lo que sea, que pueden figurar como favoritos en la intención de voto para las próximas elecciones. Que no sigan mintiéndole a este pueblo frustrado por el engaño de quien se catapultó al poder con el apoyo de una mayoría que hoy lo repudia no solo en las calles sino hasta con pintadas en las paredes de pueblos y ciudades. Que no nos saturen con la tésis de Goebbels para vendernos la idea de que el electorado istmeño quiere la reelección de la mentira personificada.
Panamá 25 de octubre de 2,012. E. Fuentes Arroyo, ced. 7-44-677...
